En las 22 navidades que he pasado, ninguna he sido capaz de escuchar el típico discurso de noche buena del rey. Sentada o aun ayudando a poner y/o arreglar la mesa, nunca he ido más allá del comienzo de sus palabras, cada año, vacías para mi.
Este año ha sido diferente –no porque tuvieran algún tipo de contenido…-, comenzó el discurso, y decidí que tenía que escuchar lo que decía, y no apagar la televisión –cambiar de canal no es viable, ya que durante más o menos media hora, todos y cada uno de ellos se centra en su persona y en lo que tiene que decir-.
Se centró básicamente en tres acontecimientos, los treinta años de la constitución, la lucha contra el terrorismo, y la crisis económica –el Follonero debe estar feliz por esto!-
En los mismos puntos me centraré en esta reflexión.
En primer lugar, la constitución, “construida sobre la concordia y el consenso, el respeto mutuo y la tolerancia, recoge las mejores conquistas de toda democracia avanzada, articula nuestra diversidad territorial, y asegura nuestra estabilidad y progreso”, éstas fueron algunas de sus palabras, me pregunto si realmente se cree lo que está diciendo. Una constitución construida sobre la ‘concordancia y el consenso’, una constitución anclada en el pasado, una constitución que no refleja la realidad actual, una constitución que necesita con urgencia una reforma. Una constitución que ‘recoge las mejores conquistas de toda democracia avanzada’? Si realmente la democracia actual existente es para el rey una democracia avanzada, arreglados vamos…
La constitución es ancestral, y la democracia actual, insuficiente, incompleta, y con grandes vacíos sociales, culturales y políticos.
En segundo lugar, también habló de la lucha contra el terrorismo. Recuerda “los nombres de todas y cada una de las víctimas del terrorismo” -¿cierto? Me pregunto si también recordará a todas aquellas personas que su antecesor asesinó…- Las palabras “nuestros derechos y libertades, empezando por la vida, no pueden ser violados y amenazados por profesionales del terror, por lo que debemos seguir luchando para derrotar al terrorismo”, resuenan en mi cabeza. Palabras que, haciendo referencia solo a ETA, respaldan y disculpan al resto de fuerzas y cuerpos de seguridad del estado español –autoridades policiales y judiciales…- que criminalizan y reprimen en muchas ocasiones a personas que, como el dice, tienen sus derechos y libertades, y los ejercen, siendo cortados de raíz –siempre que se puede- cada vez que se cuestionan las instituciones del estado –manifestaciones, quema de fotos del rey…-
En tercer lugar, y sin extenderme más, habla de la actual crisis económica, “juntos podremos vencer problemas y dificultades si actuamos con realismo, rigor, ética y mucho esfuerzo, anteponiendo siempre el interés general sobre el particular, buscando acuerdos y soluciones con generosidad, responsabilidad y amplitud de miras”. Habla de realismo, de ética, de interés general… y se le llena la boca. Me pregunto si se incluye, no solo él, sino la familia real al completo.¿Es ético que cada uno de los ciudadanos/as financiemos la vida ‘real’?
Este año ha sido diferente –no porque tuvieran algún tipo de contenido…-, comenzó el discurso, y decidí que tenía que escuchar lo que decía, y no apagar la televisión –cambiar de canal no es viable, ya que durante más o menos media hora, todos y cada uno de ellos se centra en su persona y en lo que tiene que decir-.
Se centró básicamente en tres acontecimientos, los treinta años de la constitución, la lucha contra el terrorismo, y la crisis económica –el Follonero debe estar feliz por esto!-
En los mismos puntos me centraré en esta reflexión.
En primer lugar, la constitución, “construida sobre la concordia y el consenso, el respeto mutuo y la tolerancia, recoge las mejores conquistas de toda democracia avanzada, articula nuestra diversidad territorial, y asegura nuestra estabilidad y progreso”, éstas fueron algunas de sus palabras, me pregunto si realmente se cree lo que está diciendo. Una constitución construida sobre la ‘concordancia y el consenso’, una constitución anclada en el pasado, una constitución que no refleja la realidad actual, una constitución que necesita con urgencia una reforma. Una constitución que ‘recoge las mejores conquistas de toda democracia avanzada’? Si realmente la democracia actual existente es para el rey una democracia avanzada, arreglados vamos…
La constitución es ancestral, y la democracia actual, insuficiente, incompleta, y con grandes vacíos sociales, culturales y políticos.
En segundo lugar, también habló de la lucha contra el terrorismo. Recuerda “los nombres de todas y cada una de las víctimas del terrorismo” -¿cierto? Me pregunto si también recordará a todas aquellas personas que su antecesor asesinó…- Las palabras “nuestros derechos y libertades, empezando por la vida, no pueden ser violados y amenazados por profesionales del terror, por lo que debemos seguir luchando para derrotar al terrorismo”, resuenan en mi cabeza. Palabras que, haciendo referencia solo a ETA, respaldan y disculpan al resto de fuerzas y cuerpos de seguridad del estado español –autoridades policiales y judiciales…- que criminalizan y reprimen en muchas ocasiones a personas que, como el dice, tienen sus derechos y libertades, y los ejercen, siendo cortados de raíz –siempre que se puede- cada vez que se cuestionan las instituciones del estado –manifestaciones, quema de fotos del rey…-
En tercer lugar, y sin extenderme más, habla de la actual crisis económica, “juntos podremos vencer problemas y dificultades si actuamos con realismo, rigor, ética y mucho esfuerzo, anteponiendo siempre el interés general sobre el particular, buscando acuerdos y soluciones con generosidad, responsabilidad y amplitud de miras”. Habla de realismo, de ética, de interés general… y se le llena la boca. Me pregunto si se incluye, no solo él, sino la familia real al completo.¿Es ético que cada uno de los ciudadanos/as financiemos la vida ‘real’?
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